Resumen
En el presente trabajo hemos desarrollado, mediante ejemplos, los dos métodos para hacer inferencias, la estimación y las pruebas de hipótesis, así como seleccionar el tipo de muestreo a usar. Este último depende de la variabilidad de la población, el marco muestral que se dispone y los costos.
Metodológicamente, la estimación contesta la pregunta: ¿Cuál es el valor numérico de un parámetro O?. Por otro lado, la prueba de una hipótesis resuelve la pregunta ¿Es O igual a un valor numérico específico Oo?. El método inferencial usado en una situación dada depende muchas veces de cómo el experimentador decide hacer su inferencia. A veces ésta decisión no depende del experimentador. Es decir, la cuestión práctica implica claramente que debe aplicarse un procedimiento de estimación o de prueba de hipótesis. Por ejemplo, la aceptación o el rechazo de suministros que llegan o de productos que salen en un proceso manufacturero claramente requiere una decisión o sea, una prueba estadística.
La determinación de la bondad de la inferencia se relaciona con ambos métodos. La amplitud esperada de un intervalo de confianza y el coeficiente de confianza miden la bondad del procedimiento de estimación. Así, la bondad de una prueba estadística se mide por la probabilidad X y B de los errores tipo I y II. Estas medidas de bondad nos permiten comparar una prueba estadística con otra y establecer una teoría para obtener pruebas estadísticas con propiedades deseadas. La capacidad para evaluar la bondad de una inferencia es una de las mayores contribuciones de la estadística al análisis de datos experimentales ¿Cuál es el valor de la inferencia si no tenemos una medida de su validez?.
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